No eres para mi, no tardes en llegar.

No sé como empezar esto... Mi cabeza y mi corazón no se ponen de acuerdo, caos. Estoy abierta a cualquier sugerencia, a cualquier punto de vista, ¿la razón? Cansada de sentir pena de mi misma. Y, no veo una mejor forma de empezar los diecisiete que superándote a ti misma, dejando atrás las heridas del pasado, que como toda herida se curará, a base de alcohol. Crearé mi propia autodefensa contra cualquier capullo que se proponga hacerme daño, ¿una nueva personalidad? No lo creo, yo lo llamaría más bien un "basta de ser tan gilipollas". Nunca se me ha dado bien eso de hacerme la dura, pero esto no es lo que quiero. Todo el mundo se merece a alguien que la valore y no la infravaloré, y si ese no eres tú, podré esperar. Y también es cierto que quiero que seas tú aquel que me valoré, pero parece que no compartimos la misma opinión. Tu no quieres ataduras y yo tampoco, tu quieres a una chica que sea de todos y yo busco a un chico para el cual ser su más preciada posesión. Hay veces en la vida, en que los caminos se separan, lo único que te voy a decir es un "Hasta pronto", porque tengo seguro que te volveré a ver, aunque sé que no volverás a por mi, no podrías. No eres para mi. Pero estás a prueba, y si vuelves antes de que haya llegado otro, ten por seguro que volveremos a jugar. No tardes en llegar. Y si tardas, voy a saber ponerte una sonrisa, si, esa que tanto te gustaba, cuando estés descubriendo las sonrisas de otras, a ver si con un poquito de suerte consigo atraparte para luego tirarte. Voy a pasármelo bien. Y si ya no te gusta mi sonrisa, habrán otras bocas a la que si. Esta son la clase de cosas que con un poquito de daño te ayudan a darte cuenta de lo joven que eres, de las piedras que te quedan por pisar, y de las curvas por las que pasar. Pero hago un llamamiento al destino para que no pongan nuestra canción cuando estemos separados, quiero que estemos juntos, a ver que pasa. ¿La cantarás mirándome a los ojos o la tararearás observando tus zapatos? Nuestra canción o debería decir la canción por la que supe quererte conocer un poco más. No lo tengo claro. Lo que si tengo claro, es que no voy a ser capaz de borrarla de mi lista de reproducción, solo voy a saber pasarla con el dedo. Y la tengo en tantas versiones, que lo quieras o no siempre vas a aparecer por sorpresa en mi mente. Serán esas las sorpresas que me debes. Solo me queda decirte, que yo si que espero un mensaje tuyo por sorpresa, y quizás por el simple hecho de esperarlo, nunca llegue, pero si no llega, te espero a ti. Ven, aprende a llegar, reacciona. Te creía listo, no me falles, ahora no.
Seis meses jota. Vuelve.